PROPUESTA
Encontrarnos
sin ojos,
sin
pasos ni voz;
sólo
entrelazar las manos
carentes
de espinas y navajas.
Únicamente
terciopelo
que
mana suave y tibio
con
un corazón de fondo.
Encontrarnos
a sabiendas
de
ser frustradas mariposas
/ orugas inmortales.
La
única esperanza es inasible;
resonancia
de un canto inventado
por
pájaros prematuros
/ fugaces.
Encontrarnos sin soslayar el terror;
reconocer el altar que le hemos erguido
junto a nuestros antepasados,
cercano a un colmillo animal
resguardando su carnaza
y a los gatos nacidos de las tapias.
Encontrarnos en la paz ganada
/
a puños
de polvo de lunas y estrellas
en las noches más silenciosas,
cuando ni los grillos nos sacudan
y las luciérnagas elijan otro verano.
S.M.